La piel es un órgano vital que nos protege del medio ambiente y los agentes externos. Es importante cuidarla y mantenerla hidratada para que conserve su elasticidad y luminosidad. Sin embargo, en algunas ocasiones, la piel se vuelve sensible, lo que puede ser muy molesto. ¿Por qué ocurre esto? En este artículo te contamos las principales causas de la piel sensible.
¿Cómo se llama la enfermedad de la piel sensible?
La enfermedad de la piel sensible es un trastorno de la piel que se caracteriza por una sensación de picor, ardor, escozor o dolor. La piel sensible puede ser causada por una variedad de factores, incluyendo la exposición al sol, la sequedad, la irritación, la inflamación, la alergia o la sensibilidad a los cosméticos o productos para el cuidado de la piel. A menudo, la enfermedad de la piel sensible es crónica y puede ser muy difícil de tratar.
¿Cómo quitar la sensibilidad de la piel?
La sensibilidad de la piel puede ser un problema muy molesto. A veces, la gente piensa que la única solución es usar productos químicos agresivos, pero esto no es necesariamente cierto. Hay una serie de medidas que puedes tomar para reducir la sensibilidad de tu piel.
Primero, asegúrate de usar una crema hidratante todos los días. La piel seca es más propensa a ser sensible. Si tu piel está muy seca, busca una crema que sea especialmente hidratante o que tenga aceite en su fórmula.
Otro consejo es exfoliar tu piel de forma regular. La exfoliación ayuda a quitar las células muertas de la piel, lo que la deja más suave y menos sensible. Puedes exfoliar tu piel una o dos veces por semana, dependiendo de tu tipo de piel.
También es importante proteger tu piel del sol. El daño solar puede aumentar la sensibilidad de la piel. Utiliza un protector solar con un factor de protección solar (SPF) de 30 o más cada vez que salgas, incluso si no está muy soleado.
Por último, trata de evitar el contacto con productos químicos agresivos. Esto incluye jabones perfumados, lociones para el cuerpo, aceites para el baño, etc. Si tu piel es muy sensible, incluso puedes necesitar usar productos hipoalergénicos.
Siguiendo estos consejos, puedes reducir la sensibilidad de tu piel y mejorar tu calidad de vida.
Las personas con piel sensible pueden experimentar una variedad de síntomas, incluyendo enrojecimiento, picazón, sequedad y descamación. A menudo, estos síntomas se deben a una reacción alérgica o a un trastorno de la piel, como el eccema. También pueden ser causados por la exposición al sol, el estrés, la falta de hidratación o algunos productos para el cuidado de la piel.